Como jóvenes veteranos de numerosas redacciones porteñas, conversaron al respecto el sábado por la noche con Verónica Mac Lennan, secretaria adjunta del Sindicato de Prensa, en Fahrenheit Libros.
Acerca de los medios de comunicación alternativos frente a los medios más poderosos, Di Bello señaló que son como yuyos en la banquina que se van metiendo en la autopista central y provocan fisuras. El nombre de la charla era "Los años malos", que él prefirió definir mejor como "años de mierda". Especuló además que en cuanto a lo social vienen años "más malos" por delante.
Igal insistió con la idea de que hay una crisis de las empresas periodísticas y que a la vez es un gran momento para hacer periodismo. Sobre el ejercicio de la profesión en tiempos difíciles, recordó a Rodolfo Walsh y Enriqueta Muñiz investigando Operación Masacre, y casos de la última dictadura como la Agencia de Noticias Clandestina de Walsh y las revistas Humor, Medios & Comunicación y El Porteño. Sostuvo además que empresas y gobiernos quieren y necesitan un periodismo dócil.
¿No hay esperanzas? Sí, y ambos sugirieron sus propuestas. Di Bello pidió prestar atención a las iniciativas del colectivo Mídia Ninja, en Brasil. Igal puso como ejemplo el trabajo en solitario del periodista Juan Amorín sobre los aportantes truchos de Cambiemos y lanzó como idea crear una agencia de noticias del centro del país, ante la merma del servicio de las tradicionales agencias de alcance nacional.
Ambos reivindicaron la agremiación sindical de lxs periodistas y la necesidad de salir a la calle a reclamar por la defensa de sus derechos, con especial énfasis en lograr paridad para las mujeres.
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